“Practiqué Kidpower con mis adultos y me encanta mi traje de payaso.“

Traducido por María Gámez Gisella

“Payasos de miedo.”
“Payasos siniestros.”
“Payasos locos.”

Personas que se cubren con máscaras para asustar o lastimar a otros, no son una novedad. Lamentablemente, una racha de bromas pesadas, hechos vandálicos, robos y graves ataques perpetrados por personas con máscaras de payasos ha invadido muchos lugares, ganando gran repercusión en los medios, y siendo imitados por otros. Algunas crónicas son confiables y otras han sido denunciadas como hoax.

Los padres nos preguntan:

“Mi pequeño hijo adora a los payasos, y no sabe nada sobre todo esto. ¿Cómo puedo prepararlo y evitar que se asuste?”

“¿Cómo puedo apoyar a mis hijas adolescentes, que están aterradas tras enterarse sobre los Payasos Siniestros a través de sus amigos?”

Al igual que con otros asuntos, el objetivo de Kidpower consiste en preparar a los jóvenes para tomar decisiones más seguras y apoyarlos a fin de que sientan confianza en lugar de miedo. En vez de llenar la mente de los niños con imágenes angustiantes, enseñamos reglas para la Seguridad con Desconocidos, incluyendo la seguridad con los payasos. Más abajo usted encontrará nuestras recomendaciones para que los adultos puedan abordar este tema, cómo preparar a los niños mayores y los adolescentes para afrontar un problema y cómo enseñar y practicar habilidades con los niños más pequeños a fin de evitar potenciales peligros.

El problema real radica en el comportamiento – No en los disfraces

Para proteger la seguridad emocional de los niños más pequeños, queremos evitar que ellos vean disfraces o imágenes terroríficas. Tengamos en cuenta que CUALQUIER disfraz puede ser más espeluznante que divertido o disparatado — y puede ser mal usado. A pesar de la historia pasada y los eventos recientes, el verdadero problema no está en los trajes de payaso; el problema es el comportamiento.

Queremos evitar reaccionar de manera desmedida, provocando así más ansiedad, sin lograr aportar más seguridad. Por ejemplo, en vísperas de Halloween, algunas escuelas están prohibiendo los disfraces de payasos. Lamentablemente esta reacción conlleva el mensaje de que el problema son los payasos, especialmente porque los niños pequeños tienen un modo literal de comprender las cosas.

En lugar de esto, podemos usar esta situación como una oportunidad para educar a los niños sobre las conductas seguras y riesgosas, y decir que no está permitido para nadie, sin importar el disfraz que lleve, hacer bromas acerca de lastimar o asustar a nadie. Alentamos a los niños que se disfrazan como payasos, a mostrarse disparatados sin lastimarse ellos mismos ni a otros, y a transmitir mensajes positivos sobre la confianza y la diversión.

Tradicionalmente, los payasos se han destinado al público infantil sino adulto. Eran los bufones de la corte, comentaristas sociales y humoristas culturales. Si bien fueron evolucionando como figuras que supuestamente debían ser divertidas, los payasos a menudo basaban su actuación en la comicidad en base a golpes y porrazos, haciendo reír al público al ser humillados, golpeándose o comportándose de manera poco amistosa con otros. Para muchos adultos, y niños también, el conflicto presente en sus caras alegres/tristes y sus actos dulces/crueles, evoca más miedo que diversión.

La buena noticia es que muchos artistas payasos actualmente brindan alegría, y no merecen ser condenados o atacados debido a los actos destructivos de un puñado de personas. Organizaciones tales como Payasos Sin Fronteras, llevan alegría y unión a niños y familias que enfrentan grandes dificultades, como la pobreza, catástrofes o enfermedades. Caring Clowns visitan a las personas enfermas en los hospitales y asilos, llevando sonrisas a las caras tristes.

Cómo apoyar y preparar a los niños mayores y adolescentes

Si los jóvenes ya están preocupados por el tema de los “Payasos Siniestros”:

  1. Escúchelos y reconozca sus sentimientos.Alguien que se esconde detrás de cualquier tipo de máscara para herir o engañar a la gente ES siniestro y captura la imaginación de un modo muy perturbador. Hable sobre cómo las personas involucradas en los casos de payasos siniestros y bromas aterradoras, usan disfraces para crear un disparador emocional que conduce al miedo o la ansiedad. En vez de sentirnos sobrepasados, podemos manejar nuestros disparadores emocionales, observar objetivamente lo que está ocurriendo y ensayar un plan para proteger nuestra seguridad.
  1. Elabore y practique un plan de seguridad.Visualizar y practicar qué hacer para estar más seguros en vez de sólo hablar o preocuparnos por las cosas horribles que podrían suceder, ayuda muchísimo a reducir la ansiedad mediante una acción provechosa.Por ejemplo, supongamos que mientras están fuera de casa en su ciudad, los niños ven una persona o varias, caracterizadas con máscaras o trajes de payasos u otros personajes. (Fuera de los lugares o momentos en los que se esperaría, como un desfile de Halloween). Su plan de seguridad es alejarse y dirigirse a un lugar más seguro, donde puedan recibir ayuda de otras personas, por ejemplo dentro de una tienda. Ellos pueden practicar cómo alejarse tranquila, atentamente y con respetuosa confianza, sin contestar a la persona en caso de ser llamados, dirigirse a lugares concurridos y llamar por teléfono para informar lo que han visto– o interrumpir a un empleado ocupado en una tienda, por ejemplo un cajero, para que los ayude.Pueden informar que han visto a alguien cuya conducta los inquietó, ya sea si llevaba un disfraz o no, y deben hacer lo posible para hablar con precisión sobre lo que realmente ocurrió. Pueden practicar cómo gritar y huir corriendo, si la persona intenta acercárseles.
  1. Poner las cosas en perspectiva.Hablen sobre cómo los medios de comunicación pueden dar la impresión de que cosas terribles están pasándoles a casi todas las personas, casi todo el tiempo. Necesitamos aprender cómo poner límites con los medios, filtrando la información a la vez que nos protegemos emocionalmente. Ver o leer historias traumáticas una y otra vez, no aporta seguridad para nadie – solamente los asusta.  Lamentablemente, la persona que más probablemente podría hacernos daño es alguien que conocemos, de manera que aprender una serie de habilidades sociales de seguridad para desenvolvernos de un modo seguro con las personas, incluyendocómo poner límites, es realmente importante.
  1. Participar en un taller de defensa personal física. Aprender o revisar cómo defenderse físicamente puede ayudar mucho a reducir la ansiedad, aumentando la confianza y la capacidad para estar listos para escapar ante un ataque. Esto no toma mucho tiempo. Nuestros talleres de Seguridad y Defensa Personal Teenpower, o Fullpower (para adultos) son sesiones de 4 o 5 horas en un solo día. Lea un artículo sobre cómo elegir un buen taller de defensa personal.
  1. Mantenerse a salvo en la imaginación.Tener una vívida imaginación puede constituir un don maravilloso, y sin control, puede dar origen a muchos traumas. En vez de visualizar las cosas terribles que podrían suceder, podemos aprender a estar seguros en nuestra imaginación, y cómo enseñar a nuestros hijos a hacer otro tanto. Desconéctese de los medios que repiten y recrean malas noticias. Interrumpa a las personas que cuentan casos horribles, y digamos: “No queremos hablar sobre esto. Hablemos de algo positivo o entretenido”. Enfóquese en lo bueno. Trabaje hacia la conciencia para permanecer en el aquí y ahora, sintiendo su respiración, contemplando la belleza de una flor o la sonrisa en el rostro de un ser querido.

Cómo proteger a los niños más pequeños

Para los más pequeños que no conocen las historias delictivas sobre los “Payasos Siniestros”, en vez de infundirles ideas preocupantes, prepárelos con habilidades para hacer lo necesario a fin de mantenerse a salvo.

  1. Enséñeles las reglas de Kidpower para con Personas Desconocidas, e incluya personas disfrazadas y uniformadas, entre otros ejemplos.Explique con una voz afable y realista: “La mayor parte de las personas son buenas, y esto significa que la mayoría de las personas desconocidas son buenas. Un desconocido es alguien que no conocemos bien. La regla es la misma para tratar con personas y para animales que no conocemos bien. Tu trabajo es alejarte y Preguntar Antes a tus adultos. Recuerda, un desconocido puede verse como cualquier otra persona. Tú eres desconocido para mucha gente, y ellos son desconocidos para ti. Una persona uniformada es un desconocido. Una persona con un títere es un desconocido. Una persona que va vestido como un payaso es un desconocido. No debes preocuparte. Sólo sigue tu plan de seguridad. Quédate cerca de mí, y si nos separamos y ves a una persona que no conoces bien, aléjate y Pregunta Primero.”
  1. Practique habilidades para Permanecer Juntos, Alejarse y Preguntar Primero. Pídales que imaginen que ustedes están en el Mercado Agrícola local o en un evento comunitario, y que usted se encuentra ocupado comprando, mirando productos y precios, hablando con otros adultos, o enviando mensajes por su celular. Guíelos para que practiquen cómo usar su atención y permanecer junto a usted mientras usted simula moverse rápidamente cambiando de actividad en actividad. Ahora pídales que imaginen que ellos ven algo que les gusta mucho, por ejemplo una persona con gatitos, conejitos o perritos, o alguien que ofrece gratis algo que a ellos les agrada mucho comer. Guíelos para que se alejen de esa persona y que lo/a interrumpa para Preguntar Primero, diciendo: “¿Puedo ir a acariciar los animales?” O si no: “¿Por favor puedo probar las muestras que ofrecen?” Luego diga: “Gracias por preguntar primero. Vamos juntos allá.”
  1. Recuerde que los payasos y otras personas disfrazadas a veces tienen otras reglas. A veces podemos sentirnos sorprendidos o incómodos si alguien desconocido se acerca a nuestros niños en un lugar público. Alguien con un títere o un disfraz en el Mercado Agrícola, en un complejo comercial o evento comunitario podría acercarse a los niños como parte de su trabajo para entretener a la gente, por ejemplo un payaso u otro personaje. Lo que verdaderamente importa es que los niños nos pregunten antes (¡Preguntar Primero!) en lugar de simplemente confiar en esa persona – y que los niños sepan que tienen derecho de rechazar cualquier tipo de atención que se les preste. Usted puede guiar a los niños diciendo: “Imagina esa persona vestida en un traje de colores está haciendo figuras de animales con globos o un pintacaritas, pintando las caras de los niños, y que te invita a acercarse. Supongamos que no quieres ir. Puedes mirarme y decirme: “No, no quiero ir”. Guíelos para repetir esas palabras y luego responda: “Gracias por decirme. Yo les diré que “¡Hoy no, gracias!’” Luego puede guiarlos para que pregunten antes. Diga: “Ahora supongamos que SÍ quieres ir. Puedes preguntarme primero y decir: “¿Puedo hablar con el payaso? Guíelos para que repitan esas palabras, y luego responda: “Gracias por preguntar. Iremos juntos allá”.

Promover la seguridad en vez del miedo

No queremos que el miedo impida a nuestros niños – ni a nosotros mismos – pasar buenos momentos, conocer nuevas personas y hacer cosas interesantes. En vez de temer a los payasos, podemos poner límites ante cualquier conducta inapropiada o peligrosa, sin importar cómo vaya vestida una persona – y preparar a los niños con el conocimiento y las habilidades que necesitan para mantenerse a salvo – y apoyar a los artistas payasos que se dedican a hacer felices a las personas.

Por último, si está planeando actividades para Halloween, que incluyan a niños, por favor, lea nuestro artículo Seguridad en Halloween – 8 claves de seguridad de Kidpower para planear un feliz y seguro Halloween, disponible en español.

Kidpower Founder and Executive Irene van der Zande is a master at teaching safety through stories and practices and at inspiring others to do the same. Her child protection and personal safety expertise has been featured by USA Today, CNN, Today Moms, the LA Times, and The Wall Street Journal. Publications include: cartoon-illustrated Kidpower Safety Comics and Kidpower Teaching Books curriculum; Bullying: What Adults Need to Know and Do to Keep Kids Safe; the Relationship Safety Skills Handbook for Teens and Adults; Earliest Teachable Moment: Personal Safety for Babies, Toddlers, and Preschoolers; The Kidpower Book for Caring Adults: Personal Safety, Self-Protection, Confidence, and Advocacy for Young People, and the Amazon Best Seller Doing Right by Our Kids: Protecting Child Safety at All Levels.